Sony ha encabezado una iniciativa que planea poner solución al problema. Establecer estándares comunes en los 'e-books' para que puedan ser leídos en dispositivos de distintas marcas tal vez no sea la solución definitiva, pero sí un paso importante.
Muchas veces los problemas con los libros electrónicos no tienen tanto con ver con la reticencia de la gente ante lo nuevo como con las restricciones que los e-books aún arrastran. El incidente hace unas semanas con la retirada por parte de Amazon de dos libros es un recuerdo de que "las libertades al comprar libros electrónicos con derechos digitales no son las mismas que si se compra un libro normal", dijo Holmes Wilson, de la Fundación Software Libre.
Sony ha encabezado una iniciativa que planea poner solución al problema. Establecer estándares comunes en los 'e-books' para que puedan ser leídos en dispositivos de distintas marcas tal vez no sea la solución definitiva, pero sí un paso importante.
Según The New York Times, Sony planea anunciar el jueves que para finales de año sólo venderá libros digitales en el formato ePub, un estándar de código abierto creado por un grupo de distintas editoriales. Tras el cambio, los libros comprados en la tienda 'online' de Sony se podrán leer no solo en los dispositivos de su marca Reader, sino también en cualquier otro lector que soporte el formato ePub.
"Pronto habrá una proliferación de diferentes lectores, con distintas características y a diferentes precios, según las necesidades del consumidor" dijo Steve Haber, presidente de la unidad de libros digitales de Sony. "Y la gente querrá poder elegir en qué tienda del mercado comprar su libro electrónico, y no estar obligada a comprarlo en una en concreto"
Beneficios para el usuario, pero también para la industria.
La estrategia tiene sentido. Sólo en los Estados Unidos las ventas de 'e-books' en junio alcanzaron el récord histórico de 14 millones de dólares. un incremento del 136% con respecto a las cifras del año pasado, según la Asociación de Editores Americanos.
Amazon parece ser el comensal que se lleva la parte más grande de ese pastel. Y Sony y otros competidores ven la flexibilidad y la apuesta por estándares de código abierto como la mejor forma de combatir ese dominio. No se trata de abandonar las medidas anticopia que evitan la piratería. Se trata de fomentar unos estándares comunes en la industria de los 'e-books' que beneficie a los usuarios en primer lugar y que evite, a la vez, la dominación de una sola compañía sobre el mercado.
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